…y así es como funciona esto cuando funciona, aquello que se encuentra al fin del pasillo, en el ultimo estante, detrás de cajas, al fondo y arriba… está ligado con un algo que de pronto y sin previo aviso lo trae al momento que estamos viviendo… mi memoria funciona de esa manera, que por cierto, es tan mala que hay información que requiero en un momento determinado y esta por mas que es buscada y rebuscada, no es posible encontrarla, por más esfuerzos de concentración que uno haga… y por ello, cuando hay algo, un momento en mi vida que me es placentero, trato de apreciarlo minuciosamente, de observar cada detalle, los colores, los sonidos, los olores, me relajo, cierro los ojos, respiro… hago que esa sensación se quede dentro, grabada con todos sus elementos… y es así cuando en ocasiones sin darme cuenta, sin aparente razón, hay momentos en que me siento cómodo, nervioso, irritable, o sorprendentemente feliz… sin más en algún, un momento, una situación… de pronto, una melodía, se liga a una brisa, a un mechón de cabello, a una ceja, a una voz… un escalofrió… y el momento que se vive adquiere un valor, pero no es el momento mismo, es solo que traspapelado ahí con los archivos del hoy, se han mesclado algunos elementos del pasado, son sensaciones que aun tenemos vivas, o no tan muertas en algún lugar dentro de nosotros y que salen ahora a tomar aire, ayudadas por ese detalle que nosotros ignorábamos que tenia tal cualidad… como bien decía mi hermano un día… “no sabía que sabía”… pues ayer no sabía que esperaba… de hecho no creo que lo esperara, pero hoy llego ese día, obvio tenía que llegar, todas las fechas llegan, todos los 21, los 25, los 9, los 31, todos los demás días… todos! regresan un día, solo que uno no se da cuenta (o no quiere darse cuenta), de que esos días aun existen, menos cuando a uno los días se le van como el agua de lluvia por la alcantarilla… hoy no tenía planeado estar donde estoy, ni pasar por un lado de la pasta y la ensalada griega, me di cuenta de ello, cuando estaba sentado ya en el sillón, cuando escuche, no sé de donde, esa melodía... y vi unos dedos blancos, largos y delicados… bajo un fleco negro unos ojos y una sonrisa fresca… y una voz… y ahí me fui, solo un instante, tanto tiempo!... cuando regreso la sonrisa, vi que, obvio no eras tú, pero me ha caído muy bien… pedí un expresso cortado doble, una tarta de frutas (la en ese tiempo te gustaba tanto)… y me atreví a pedirle una vela… te cantamos las mañanitas, ella a mi (pensó era mi cumpleaños), yo a ti… después se disculpo y fue a seguir en lo suyo… yo me quede ahí disfrutando de tu celebración, mira que si lo planeo no me sale, o tal vez hubiera sido un día de perros… no se… cuando me fui, pague la cuenta, deje una propina mas por las mañanitas que por nada, bueno el beso en la mejilla fue algo que no esperaba… regresa pronto (me dijo), creo que no re por ahí en algún tiempo, tanto tiempo y me sigues metiendo en problemas jajaja...
Feliz cumple Min!
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